¿Cómo nos ayudan las apps para mejorar nuestra inteligencia?

Cuando entramos a echar un vistazo a la App Store o a Google Play (cosa que hacemos a menudo, al menos yo), no hay día que no encontremos nuevas apps relacionadas con ejercitar nuestra materia gris. Ya sean juegos de estrategia, medidores del Cociente Intelectual, aplicaciones para obtener nuevos conocimientos o “entrenadores de la mente”.
Pero, ¿realmente son útiles estas aplicaciones? ¿Desarrollamos nuestra inteligencia utilizándolas? En definitiva: ¿Podemos entrenar nuestro cerebro?
Que el cerebro humano es un músculo es algo que hemos oído muchas veces; y que los músculos se ejercitan, otro tanto. Roberto Colom Marañón es catedrático de la Universidad Autónoma de Madrid en el área de Psicología biológica y de la salud, y ha dedicado su actividad al estudio de la inteligencia.
En uno de los artículos de referencia para todo aquel quiera saber más sobre este campo, la define de esta manera: “La inteligencia es una capacidad mental muy general que permite razonar, planificar, solucionar problemas, pensar de modo abstracto, comprender ideas complejas, aprender con rapidez, y aprender de la experiencia.”
En su libro “Tu inteligencia. Cómo entenderla y mejorarla”, coescrito con Alejandra Vallejo Nájera, lo deja bien claro: la inteligencia se modifica durante nuestra vida y puede entrenarse para mejorarla. En ello interviene el concepto que conocemos como “neuroplasticidad”: la capacidad del cerebro de generar nuevas sinapsis y circuitos neuronales y adaptarse a lo cambiante.
Y nos da buenas razones para intentar mejorar nuestras capacidades: “Un alto nivel de inteligencia supone una ventaja en la vida cotidiana, dado que la mayoría de las actividades diarias requieren algún tipo de razonamiento y toma de decisiones.” Creo que nadie duda, a estas alturas, de la importancia de tener unas buenas capacidades cognitivas. Son diversas las actividades de habilidad, alguna relacionada con la estrategía, laborales o de ocio que pueden verse beneficiadas si entrenamos nuestra materia gris.
Bueno, ya sabemos que la inteligencia puede potenciarse y que vale la pena hacerlo. Pongámonos manos a la obra. ¿Cómo la mejoramos?
Hay aspectos biológicos que vale la pena tener en cuenta. Ya hemos dicho que el cerebro es un músculo, y hay que cuidarlo: una buena nutrición, una buena dosis de ejercicio físico y evitar el alcohol nos ayudará. Pero también podemos entrenarlo haciéndolo trabajar. A través de ejercicios específicos podemos activar células de diferentes zonas cerebrales que mejoraran diversas capacidades (memoria, capacidad numérica…).
Aquí es donde entran las apps. Y la variedad es asombrosa. Tenemos apps que trabajan capacidades concretas, como la memoria en el caso de Remembery, o Quick Brain, para el cálculo numérico. Otras que optan por un entrenamiento general del cerebro; en esta categoría tenemos desde los clásicos Brain Training o Lumosity, hasta los más recientes Skillz o el Big Brain Training.
Existen aplicaciones que hacen trabajar nuestro cerebro a través de conocimientos específicos: el conocidísimo Duolingo nos enseña idiomas, mientras que los denominados Trivia, como el no menos famoso Preguntados, nos ayudan a adquirir conocimientos generales.
También tenemos las apps para los más pequeños, entre ellos, un juego de lógica al que dedicamos nuestra atención recientemente. Aunque también encontramos puzles y sopas de letras. Y, por supuesto, aplicaciones de la factoría Disney, como el rompecabezas Disney Dream Treats.
Por supuesto, no podemos olvidar los test de inteligencia o CI, abundantes en cualquier portal de descargas, y que tienen gran éxito entre los usuarios. Aunque los percibamos como una prueba puntual, el hecho de trabajarlos frecuentemente no deja de ser una forma de entrenar nuestro cerebro. Además, suelen contener representadas todas las capacidades: memoria, razonamiento, cálculo, lenguaje…
En definitiva, aunar juego, diversión y entrenamiento es una buena idea que puede dar grandes resultados; y además disfrutamos de una gran oferta de aplicaciones que nos ofrecen muchas posibilidades. Eso sí, Colom advierte: “La capacidad intelectual vendría a ser como una goma, se puede estirar, pero si dejas de hacerlo vuelve a su punto de partida. Para tener una mejoría general en las capacidades no se puede parar.”
Así pues, a disfrutar mientras expandimos nuestra materia gris. ¡No hay nada mejor que divertirse mientras hacemos algo productivo para nuestro cerebro!